Una nueva Ruta del Mes nos volvió a juntar para lo que más nos gusta: andar en moto, visitar lugares y disfrutar de la compañía. Muchas motos conocidas y alguna que otra incorparación. En esta ocasión, nos reunimos procedentes de distintos lugares: Bilbao, Donostia, Pamplona, Vitoria y Santander.
Punto de partida, Alsasua. Por delante, un día completo por las provincias de Álava y Vizcaya.

Un café antes de salir calentó nuestras gélidas manos. El invierno no perdona y, a primera hora, la sensación térmica era muy muy baja. Pero eso no nos iba a detener, así que…. en marcha.
Un breve paseo por el embalse Ullíbarri-Gamboa y comenzamos a subir el puerto de Urkiola desde su cara Sur. La carretera fría y húmeda no nos permitió disfrutar demasiado del trazado, así que, lo hicimos de sus vistas y sus bosques hasta que llegamos al Santuario que lo domina desde lo Alto: Santuario de Urkiola.
¿Conocéis la leyenda sobre de su roca? Según la tradición, las personas que buscan encontrar pareja dan vueltas a la piedra (se afirma que es un meteorito) que está frente al Santuario.
Unos buscando pareja, otros pidiendo cambiar de moto… por una u otra razón, quien más quien menos, dio sus vueltas a la misteriosa roca.
Y aprovechando la parada…. ¡Almuerzo! Siempre es un momento que nos gusta, pero más con el frío que teníamos metido en el cuerpo. Allí arriba, el aire soplaba con fuerza, así que, excusa perfecta para buscar un lugar donde cobijarnos y reponer fuerzas.

Una vez entrados en calor y con la energía completa, además del estómago, continuámos el recorrido que nos adentraría en Vizcaya. El castillo de Butrón nos esperaba.
Fin de semana y buen tiempo, se tradujeron en carreteras con tráfico y ciclistas. Disfrutando del camino hasta allí, en un momento nos plantamos ante el castillo. Un lugar escondido entre bosques que siempre llama la atención de quien lo visita.
Lo curioso del lugar hace que la gente se agolpe a sus pies para sacar fotos. Su inmensidad bien merece una instantánea. O varias, una para Instagram, otra para Facebook, una para enseñar a mi familia… Un rato distendido donde descansar un poco y estirar las piernas.
Y con esta parada… Rumbo a comer.
Este tramo nos llevó por la parte Sur del Urdaibai, Reserva de la Biosfera, hasta el puerto de Montecalvo donde esta vez sin tráfico, pudimos hacer unas cuantas curvas y divertirnos como pequeñuelos.
¡Y llegamos a comer! Una buena ruta se completa con una buena sobremesa y conversaciones moteras. Y como no podía ser de otra manera, lo cumplimos.

Después de comer nos quedaba la última visita del día, turno del Santuario de Aránzazu. La carretera hasta allí… sin palabras. Vistas de vértigo, curvas y asfalto en buen estado, nos llevaron hasta el final de la carretera, donde asomaba el Monasterio.
Un edificio singular por su original fachada.
La tranquilidad que se respiraba en aquel lugar nos invitaba a quedarnos, pero teniamos que volver. Este fue el momento donde nos separamos y cada uno condujo dirección a su punto de partida.
Otra estupenda Ruta del Mes completada. A pesar del frío de primera hora, un clima muy bueno, mejor compañía y todos de vuelta a casa sin ningún problema. ¿Qué más podemos pedir?.
Gracias por acompañarnos una vez más en las Rutas del Mes.